Abanico de latidos

Silvia Liliana Domínguez nació en Santa Fe, ciudad en la que ha vivido toda su vida y que se ha convertido en el telón de fondo de sus inspiraciones literarias. Desde muy joven, Silvia ha mantenido un vínculo profundo con la literatura y el arte de contar historias, una pasión que comenzó en la niñez y que floreció gracias al entorno familiar que siempre la alentó a leer y a explorar la magia de las palabras.

Durante sus primeros años de formación, cursó sus estudios en el colegio Antonia María Verna y luego continuó el ciclo secundario en el Instituto Almirante Guillermo Brown, donde obtuvo el título de Bachiller Perito Auxiliar Jurídico Notarial y Legislación Impositiva. Esta formación le permitió desempeñarse en el ámbito administrativo como secretaria en una empresa comercial, experiencia que enriqueció su habilidad para la escritura precisa y le dio una perspectiva del mundo laboral. Su trabajo de medio tiempo le abrió las puertas para perseguir su verdadera vocación: la educación.

Mientras se desempeñaba en la empresa, Silvia estudió y obtuvo el título de Profesora de Nivel Primario, comenzando así una destacada trayectoria en el sistema educativo. Su primer destino fue la Escuela N.º 26 «Patricio Cullen», donde empezó a desplegar sus talentos no solo como docente, sino también como creadora de materiales educativos, relatos y discursos para sus alumnos. Cada año escolar era para Silvia una oportunidad para inspirar a sus estudiantes y dejar una huella en sus corazones.

Desde su infancia, la lectura fue una pasión constante, y fue así como descubrió la poesía de Gustavo Adolfo Bécquer, que la cautivó profundamente. Este encuentro literario se convertiría en un punto de inflexión, motivándola a escribir sus propios poemas. Los recursos poéticos que había aprendido durante sus estudios secundarios le brindaron las herramientas necesarias para crear versos cargados de emoción y reflexión. Su cuaderno de notas se llenaba de poesía, relatos cortos, y pequeñas obras de teatro que ella misma escribía para los actos escolares, fusionando su vocación docente con su amor por la literatura.

A lo largo de su vida, Silvia continuó explorando distintos géneros literarios y probando nuevas formas de expresión. Su primer proyecto literario formal fue una antología para niños en edad escolar. Esta obra incluía una rica colección de poemas, fábulas, leyendas y relatos breves diseñados para captar la atención de los más jóvenes. La antología fue muy bien recibida en el ámbito educativo y se utilizó como herramienta pedagógica. El éxito de este proyecto fue un punto de partida que marcó el comienzo de su trayectoria como escritora y la consolidación de un sueño: escribir y publicar un libro propio.

Una vez jubilada, Silvia se encontró en una etapa de su vida en la que podía dedicarse plenamente a la escritura, y decidió llevar su sueño a otro nivel. Con la determinación que siempre la ha caracterizado, se inscribió en diversos talleres literarios, tanto de narrativa como de poesía, buscando perfeccionar su estilo y adquirir nuevas técnicas. Participó en cursos de capacitación donde aprendió a perfeccionar su voz narrativa y explorar a fondo su capacidad para conectar con el lector a través de las palabras. Su dedicación y constancia le han permitido crear una obra que, además de entretener, logra transmitir valores y reflexiones profundas.

Silvia Liliana Domínguez ha logrado plasmar en sus obras su amor por la literatura y su deseo de inspirar a otros. Sus escritos, fruto de años de experiencia y formación, reflejan su sensibilidad, creatividad y una gran capacidad para conectar con el lector. Hoy, su voz literaria sigue resonando, invitando a cada lector a adentrarse en sus historias llenas de imaginación y profundidad.

Para aquellos que buscan una lectura conmovedora y enriquecedora, las obras de Silvia ofrecen no solo entretenimiento, sino también una invitación a reflexionar sobre la vida, la educación y el poder transformador de las palabras.

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